Un experto en inteligencia artificial de la Universidad de Alberta está detrás de un proyecto destinado a proporcionar compañía a personas mayores aisladas.

Osmar Zaïane es el jefe del proyecto del Automated Nursing Program, un chatbot en desarrollo diseñado para simular una conversación dinámica y proporcionar satisfacción social a los ancianos que experimentan soledad.

https://www.amii.ca/ana-automated-nursing-agent/

Ana, una agente de software de conversación (es decir, chatbot), está diseñada para conversar con los ancianos que viven en casa para responder preguntas generales y recordarles eventos específicos. Ana puede extraer de las conversaciones entidades nombradas (es decir, lugares, personas, recetas, nombres de recetas, etc.), así como las relaciones (es decir, vínculos familiares, profesiones, actividades, eventos temporales, etc.) Ana extrae información del texto obtenido de un convertidor de voz a texto; a partir de esto, construye una base de conocimiento personalizada que le permite responder preguntas personales. Ana también puede responder preguntas impersonales de fuentes en Internet.

https://www.amii.ca/ana-automated-nursing-agent/

“Nuestra población está envejeciendo. La gente vive más. No tenemos suficientes hogares de ancianos para todos y no todos quieren ir a hogares de ancianos “, dijo Zaïane. “A menudo pierden a su pareja en la vida, por lo que viven en casa, solos, y sus familias están muy lejos. Hay un impacto significativo con la soledad en su salud mental y también en su salud física “.

El proyecto difiere de los chatbots populares como Siri y Alex, que están orientados a tareas, lo que significa que responden a las entradas para realizar funciones como reproducir una canción o encender las luces. En cambio, el bot de Zaïane es conversacional, y ninguna de sus respuestas está codificada: el bot genera dinámicamente el diálogo sobre la marcha, lo que significa que las conversaciones sobre temas como el clima no serán repetitivas.

El robot aprendió los fundamentos de la conversación y la estructura de las oraciones cuando los investigadores le dieron millones de líneas de diálogo de películas y programas de televisión. Ahora, Zaïane y su equipo se están enfocando en hacer que el bot procese algunos matices de conversación que los humanos entienden tácitamente pero que las computadoras tienen dificultades para comprender.

“No es algo trivial”, dijo Zaïane. “En este momento estamos trabajando en, por ejemplo, cómo expresar emociones, cómo detectar emociones, cómo permanecer en el tema, cómo responder a un mensaje que no tiene sentido”.

El bot podrá hablar sobre cualquier cosa, desde la familia hasta los viajes y la comida. Además de la conversación, el bot realizará tareas como recordar a los usuarios que tomen sus medicamentos.

El proyecto es parte de la red MetroLab, que conecta universidades y ciudades en un intento por resolver desafíos sociales comunes. La Universidad de Alberta y la ciudad de Edmonton son miembros de la red.

Tras un mayor desarrollo y pruebas, Zaïane espera que surja una oportunidad para comercializar el chatbot a través de la red. No hay una línea de tiempo para el lanzamiento del proyecto.

Más información: Alberta Machine Intelligence Institute. (AMII)